viernes, 22 de marzo de 2013

PATRICIA SMITH CHURCHLAND



Patricia Smith Churchland (1943-). Filósofa canadiense, nacida el 16 de julio de 1943. Desde 1984 desarrolla su labor en San Diego, en la Universidad de California. Actualmente es profesora en el departamento de filosofía de la Universidad de San Diego, profesora adjunta en el Instituto Salk para estudios Biológicos, y asociada al Laboratorio Computacional de Neurociencias (Sejnowski Lab) en el Instituto Salk. Ganó el Premio MacArthur en 1991. Estudió en la Universidad de la Columbia Británica, la Universidad de Pittsburgh, y la Universidad de Oxford. Enseñó filosofía en la Universidad de Manitoba desde 1969 a 1984. Es la esposa del filósofo Paul Churchland.

Sus estudios se centran en la neurofilosofía y la filosofía de la mente. Patricia Smith Churchland ha enfocado sus estudios en la relación entre las neurociencias y la filosofía. De acuerdo con ella, los filósofos se están dando cuenta de que para entender la mente primero debe entenderse el cerebro. Se asocia a la escuela de pensamiento llamada eliminativismo o materialismo eliminativo, la cual argumenta que los conceptos de la psicología popular como "creencia", "voluntad libre" o "conciencia" necesitarán ser revisados cuando la ciencia entienda más acerca de las funciones del cerebro. Sigue el llamado "Programa de Coevolución de las Ciencias", según el cual las ciencias menos desarrolladas deben evolucionar presididas por aquellas otras que son más completas, que en el caso de los problemas que nos ocupan serían las neurociencias. Es por esto que, según Patricia Smith Churchland, tantas ramas de la psicología están destinadas a desaparecer. También podemos llamarla naturalista, debido a que piensa que la investigación científica es la mejor fuente para entender la naturaleza de la mente. En definitiva, el objetivo más ambicioso de sus investigaciones es alcanzar una ciencia unitaria de la mente/cerebro. Sus trabajos más recientes se centran también en la neuroética, e intentan entender la elección, la responsabilidad y las bases de las normas morales en términos de funciones cerebrales, evolución del cerebro, e interacciones cerebro/cultura.



En su artículo "The Big Questions: Do we have free will?" cita el caso de un hombre que tenía conductas sexuales compulsivas, las cuales se deberían a un tumor presente en su hipotálamo, región del cerebro que regula las conductas sexuales. Al extirpárselo su conducta volvió a la normalidad por un tiempo, hasta que se desencadenaron nuevas tendencias patológicas, las cuales se debían, nuevamente, a otro tumor que se había desarrollado en la misma zona. Al ser eliminado, el paciente recuperó su conducta normal. Este tipo de casos genera cuestionamientos acerca de la existencia de algo así como una voluntad libre, desde el momento en que la misma puede ser "usurpada" por un tumor: en rigor, la manera en que la voluntad de este hombre se vio afectada por la dimensión biológica es la misma que afecta a todos los seres humanos. Así pues, la filosofa termina afirmando que no hay algo así como un "libre albedrío". Fue entrevistada junto con su esposo Paul Curchland para el libro "Conversaciones sobre la conciencia" de Susan Blackmore, (2006).

Obras: "Neurofilosofía: Hacia una ciencia unificada de la mente-cerebro"; "El Cerebro Computacional"; "Neurofilosofía y la Enfermedad de Alzheimer"; "El Continuo Mente-Cerebro"; "Ensayos Críticos 1987-1997".




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